top of page

Nigeria y sus 200 años de historia


Original aquí

Hace poco, he realizado un informe económico para la asignatura Historia económica, este informe se basaba en algunos países de África Occidental y tras haber estudiado la evolución de esos países, hubo uno que me llamó la atención, y es sobre el que realizaré un breve comentario: Nigeria.


Nos remontamos a finales del siglo XVIII en los que Gran Bretaña será la primera potencia europea que explorará el interior de África Occidental. En 1914, Inglaterra unificó administrativamente todos estos pueblos, interesada en explotar el estaño y las riquezas agrícolas y forestales del lugar.

Los británicos fueron conquistando Nigeria y sometiéndola a su administración de manera indirecta ya que usaron como intermediarios a los emires musulmanes del norte, lo que dio preponderancia política a aquella zona.En 1947, con el fin de reducir las tensiones étnicas y religiosas, la administración colonial articuló un sistema federal de gobierno, creando nuevas divisiones administrativas.

La independencia llegó en 1960, la cual le dio el poder al Northern People's Congress (del norte), en coalición con el National Council of Nigerian Citizen (de extracción ibo). Pero la estructura federal (cuatro estados) y el parlamento bicameral, perfectamente copiado del modelo británico, a la hora de actuar daba más poder a los gobernantes regionales que al presidente, Nnambi Azikiwe. Los partidos progresistas fueron desplazados por sucesivos fraudes electorales y los caudillos comenzaron a priorizar los intereses exclusivos de sus etnias.


El ejército pasó a ser gobierno cuando el general Yacubu Gowon asumió la presidencia en 1966. En 1967 comenzaba la explotación de petróleo en el país, al tiempo que Francia estimulaba el separatismo de los ibo. La guerra civil en Biafra provocada por la escisión unilateral de la república de Biafra, esta duró desde 1967 hasta 1970 y perseguía el objetivo de terminar en secesión pero finalmente fracasó.


En 1978, una reforma constitucional y un llamado a elecciones, prepararon el retorno de los civiles al gobierno. El nuevo presidente, Shehu Shagari, lanzó un plan capitalista, basado exclusivamente en las ganancias generadas por el petróleo, con la pretensión de convertir a Nigeria en el principal polo de desarrollo de África subsahariana. Dicho presidente prometió construir una nueva capital, duplicar las matrículas en la enseñanza primaria y secundaria, y lograr la autosuficiencia alimentaria por medio de una polémica «revolución verde».

Sin lograr ninguna de las propuestas, los índices económicos mostraban un panorama sombrío, con aumento del contrabando, concentración de inmigrantes y campesinos pobres en las ciudades, desempleo y reducción del nivel de vida de los asalariados, el país no estaba pasando por un buen momento. A esto había además que añadirle las exigencias del FMI para refinanciar la deuda externa. Igualmente, Shagari fue elegido de nuevo en 1983 con el PNN, entre denuncias de fraude y conspiraciones militares.

El 1º de enero de 1984, Muhamad Buhari dio el cuarto golpe de Estado, acusando al gobierno de corrupción en el sector petrolero, que representaba el 95% de las exportaciones. Hubo detenciones a todo nivel y se sustituyeron los gobernadores civiles por militares.

El agravamiento de la crisis, una deuda externa que alcanzó los 15.000 millones de dólares, la represión y la expulsión de 600 mil extranjeros ilegales, crearon el marco para un nuevo golpe.

En 1985, el general Ibrahim Babangida, después del derrocamiento del régimen militar anterior, llega al poder presidido por el general Buhari. Aunque Babangida se comprometió a la celebración de elecciones en 1988, éstas no se llevaron a cabo hasta 1993, y sólamente con la participación de dos partidos legalizados: la Convención Republicana Nacional (NRC), y el Partido Socialdemócrata (SDP). mientras que el SDP.

El candidato del SDP, Moshood Abiola, consiguió la victoria sobre Bashir Tofa, candidato de la NRC, pero el Presidente Babangida anuló los resultados y Abiola se vió obligado a exiliarse temiendo por su vida.

Tras la renuncia de su puesto, del Presidente Babangida en agosto de 1993 y el acceso a la presidencia del Ministro de Defensa, el general Sani Abacha, el país volvió a vivir tiempos de terror que acabaría en 1999, tras las elecciones democráticas en la que saldría elegido Presidente el general Olusegun Obasanjo.


En 2000 Obasanjo visitó Lagos, donde violentos enfrentamientos étnicos entre los ijaw y los ilaje terminaron con cientos de muertos. El presidente logró, estableciendo un comité de paz con los líderes, detener provisoriamente los incidentes. Pero al año siguiente, en el estado de Nasarawa, estalló la violencia étnica entre azaras y la minoría tiv tras la muerte de un líder comunitario azara.

En 2001, las líneas telefónicas de Nigeria estaban siendo a tal punto interceptadas que incluso las llamadas internacionales realizadas por miembros del gabinete eran interrumpidas sin previo aviso. Las mayores compañías de telefonía celular del país, prometieron una «revolución en el cableado» pero, de hecho, los frecuentes cortes de luz y la sobretensión hacían que las torres de transmisión de cada empresa requirieran sus propios generadores de energía eléctrica. Además, cada compañía debía pagarle al gobierno honorarios de licencia por un monto de 285 millones de dólares. De acuerdo al índice de Transparencia Internacional de 2001, Nigeria era el segundo país más corrupto del mundo, después de Bangladesh.

Poco después, Obasanjo, junto con los presidentes de Sudáfrica, realizaron el lanzamiento formal de la Nueva Sociedad Para el Desarrollo Africano (NEPAD), que llamó al resto del mundo a asociarse con el desarrollo del continente. La NEPAD comprometió a los estados africanos a instituir gobiernos claros y abiertos, respeto a los derechos humanos y a poner fin a las guerras a cambio de más ayuda exterior y un levantamiento de las barreras comerciales que obstaculizaban las exportaciones africanas.

En los años 2001 y 2002, una versión radical del código islámico Sharia, introducido en una docena de estados musulmanes de Nigeria, provocó gran controversia y protestas violentas.

En abril de 2003 Obasanjo fue reelecto presidente, en medio de una violenta jornada electoral calificada por observadores de la Unión Europea como fraudulenta y cuyo resultado fue considerado inaceptable por la oposición.

Asesinatos políticos y ataques armados diversos marcaron, en marzo de 2004, el comienzo de la campaña para las elecciones locales. En mayo se declaró estado de emergencia en Plateau State (estado situado en el centro del país) luego de violentos enfrentamientos religiosos.

En setiembre de 2004, Dokubo Asari, líder del grupo rebelde Fuerza Voluntaria del Pueblo del delta del Níger (FVPDN), quien había anunciado que desataría una «guerra en el estado nigeriano» y contra las compañías petroleras extranjeras del Delta del Níger, dijo estar dispuesto a negociar con Obasanjo el cese de la violencia en la zona. El líder rebelde exigió «el control de los recursos y la autodeterminación» para la etnia ijaw, que se encontraba sumergida en la más extrema pobreza. Asari declaró que su misión era proteger los derechos económicos y políticos de la población ijaw.

Los beneficios económicos del petróleo en la región Delta del Níger van directamente al gobierno o a las compañías extranjeras, y la mayoría de los trabajadores son extranjeros. Los vertidos de petróleo en la zona han arruinado las fuentes de sustento de un gran número de pobladores. Los programas lanzados por algunas petroleras para mejorar el medio ambiente y los estándares de vida de la población local han tenido un efecto casi nulo en el combate a la pobreza.

Desde enero de 2006, en su exigencia de mayor control por la riqueza de la zona, los militantes del delta del Níger comenzaron a atacar oleoductos y otras instalaciones petroleras, así como a secuestrar a trabajadores extranjeros de esta industria. Para abril, con la ayuda de los precios récord del petróleo, Nigeria se había convertido en el primer país africano en pagar su deuda con el Club de París.

El clima previo a las elecciones presidenciales y parlamentarias de 2007 estuvo marcado por las protestas y violencia.

Finalmente, Umaru Musa Yar'Adua, del PDP, quien era gobernador del estado norteño de Katsina, resultó electo. Candidatos de la oposición y observadores electorales de la Unión Europea denunciaron distintos casos de fraude electoral, violencia, «votos que se esfumaron» y otras prácticas durante los comicios.




Who's Behind The Blog
Recommanded Reading
Search By Tags
No hay tags aún.
Follow "THIS JUST IN"
  • Facebook Basic Black
  • Twitter Basic Black
  • Google+ Basic Black
bottom of page